"La guerra es el asunto más importante para el Estado.Es el terreno de la vida y de la muerte, la vía que conduce a la supervivencia o a la aniquilación , no puede ser ignorada".
Así comienza El arte de la guerra de Sunzi. Redactado en la China antigua ( hace más de 2300 años).
El presidente Obama tendrá sus guerras. Hereda una derrota (Irak) y en el Hindu-Kush todo es posible. Israel guarda el Próximo Oriente. El terrorismo antiimperialista es una seria realidad amenazante. A Obama le toca gobernar en el principio del declive del Imperio puritano de Norteamérica; más les vale sacar su retórica más presentable: la tradición liberal de Roosevelt y enterrar la prepotencia garrula de los fundamentalistas. Necesitará de todos sus aliados, occidentales y orientales. Ha quedado claro que no hay lugar para sueños hegemónicos. El mundo es multipolar y la crisis financiera, originada en Norteamérica, evidencia pronfundos desequilibrios y huídas sin sentido.
Obama tendrá su guerras y no saldrá victorioso. Porque Occidente ya no sabe que la guerra es lo más importante; el craso economicismo lleva demasiado tiempo haciendo estragos en las conciencias.
Obama tendrá sus guerras.
Bien,volvemos a meditar oscuramente en la necesidad histórica de la guerra.Esta vez,como la anterior,la guerra civil mundial se vertebrará como necesidad economica,trasformación de la economía en economía de guerra para que la crisis se transforme en algo diferente.Curiosamente,en 1945,la gente occidental pensaba que volvería al periodo economico de crisis,al ciclo del año 29.No sucedió asi,la guerra -paradojicamente-había creado un nuevo ciclo,pagandose por ello con un terrible precio en destrucción de cosas y personas.
ResponderEliminarGuerra e historia son sinónimos; la era del espectáculo nos había acostumbrado a confundir la historia con la política económica cuando nunca hemos salido de los cíclos bélicos recurrentes tal el eterno retorno del Doctor Niet.
ResponderEliminarLa lucha por el poder mundial se vuelve evidente tras el parénteis abierto con la Caída del Imperio soviético en 1989-1991.
Para dejar de lado la oscuridad en esta necesaria meditación hay que frecuentar la buena compañia de los clásicos : Sunzi, Heráclito, Tucídides, Julio César, San Agustín, Maquiavelo, Hobbes, Hegel, Von Clausevitz, Napoleón, Marx, Engels,Sorel, Lenin ,Carl Schmitt, Stalin, Mao, Guevara...judíos del Pentágono y Bin Laden.